Índice
    Taxonomía
    Nombre científico Myzus persicae 
    Familia Aphididae del órden Homoptera.

    Biología
    Los áfidos son insectos diminutos de aproximadamente 1/8” de largo. Tienen el cuerpo blando y su parte posterior es redondeada en forma de pera. 


    Se caracterizan porque en la parte posterior poseen dos estructuras tubulares de color oscuro. A estas estructuras se les llama cornículos. 

    El color de las diferentes especies de áfidos varía desde tonos amarillosos hasta colores oscuros. Normalmente, los áfidos no tienen alas, pero las pueden desarrollar para migrar a nuevas áreas a causa del hacinamiento o la escasez de alimento. Estos insectos se reproducen en grandes números en un tiempo relativamente corto. 

    Pueden completar su ciclo de vida en aproximadamente 10 a 14 días. Su ciclo de vida consta de tres etapas: huevo, ninfa y adulto. Los áfidos pertenecen al grupo de los homópteros al igual que las queresas y las chinches harinosas.


    Las ninfas tienen la cabeza y el tórax oscuro; y el abdomen amarillento y sus ojos rojos. Los alados tienen una importante mancha negra extendida sobre los tergitos abdominales 4 a 7, con bandas negras tranversales en tergito 1 a 3. Miden 1,3 a 2 mm.


    Distribución
    El pulgón verde se encuentra en  el mundo entero, con excepción de las áreas frías.

    Hospederos
    El pulgón verde ha sido reportado al rededor del mundo atacando un sin número de  pantas diferentes.

    Aquí presentamos los principales que se pueden en­contrar en el país:
    Amaranthaceae: bledo, apio, za­nahoria; Asclepiadaceae-. maleza de leche; Asteraceae: lechuga, crisantemo, dalia, cártamo; Brassicaceae: repollo, rábano; Caricaceae: papayaChenopodiaceae: remolacha, espinaca; Convolvulaceae: camote; Cucurbitaceae: sandia, pipián, melón; Fabaceace: frijolguisantes, gandul; Liliaceae: ce­bolla; Malvaceae: algodón, flor de avispa; Pedaliaceae: ajonjolí; Poaceae: sorgo, arroz, maízcaña de azúcar; Portulacaceae: verdolaga; Rosaceae: manzana, pea Rutaceae: cítricos; Solanaceae: berenjena, papa, ta­baco, tomate, Chiltoma.

    Tipos de Pulgones

    DIURAPHIS NOXIA (MORDVILKO, 1914). “PULGÓN RUSO DEL TRIGO”
    Morfología Los ápteros son pulgones pequeños, miden aproximadamente 2 mm de longitud (entre 1,4 y 2,3 mm). Su cuerpo es alargado y convexo. El color es verde amarillento pálido a verde grisáceo y se encuentra cubierto por una fina capa de cera pulverulenta. Los cornículos o sifones son muy diminutos (vestigiales) y las antenas son también muy cortas. En el dorso del octavo segmento abdominal, presenta una prolongación o proyección arriba de la cauda que le da el aspecto de “doble cola” o de cola en forma de horquilla, cuando se lo observa de costado. Los alados poseen el abdomen verde pálido, y miden de 1,5 a 2 mm.


    GEOICA LUCIFUGA (ZEHNTNER, 1897) 
    Morfología Los adultos ápteros son de forma globular, de tamaño mediano. Miden de 1,2 a 3,3 mm de largo y los alados de 1,9 a 3,3 mm. Color amarillento a pardo amarillento, cubiertos por una cerosidad blanquecina. Las formas aladas poseen el abdomen amarillento con anchas bandas transversales en cada tergito, siendo más grandes en los últimos segmentos abdominales





    RHOPALOSIPHUM MAIDIS (FITCH, 1856). “PULGÓN DEL MAÍZ O DE LA CEBADA” 

    Morfología Los adultos ápteros poseen el cuerpo algo globoso; de color verde amarillento al verde azulado claro a veces negro, con un área en la base de los sifones, oscura a púrpura. Patas y antenas de color oscuro. Los sifones son negros, cortos, rugosos y están inflados regularmente en la parte media de los mismos; además son de menor tamaño que la mitad de la distancia entre sus bases. Los alados poseen el abdomen verde amarillento a verde oscuro sin las manchas dorsales oscuras en la base de los sifones. Las ninfas son semejantes a los adultos pero más claras. Tanto los ápteros como los alados miden entre 0,9 a 2,4 mm.

    RHOPALOSIPHUM RUFIABDOMINALIS (SASAKI, 1899). “PULGÓN DE LA RAÍZ DE LOS CEREALES”

    Morfología El adulto áptero, de color verde, algo amarillento a castaño; con una zona de color rojizo anaranjada en la base de los sifones o cornículos. Las antenas cortas, con cinco antenitos, siendo el tercero y el quinto más grandes que el resto.









    RHOPALOSIPHUM PADI (LINNAEUS, 1758). “PULGÓN DE LA AVENA” 
    Morfología Los adultos ápteros son de color verde manchado con verde amarillento a verde oliváceo pardo oscuro, a verde oliva oscuro casi negro; con un área rojiza en la base de los cornículos o sifones y la cauda. Antenas más cortas que el cuerpo, formadas por 6 antenitos.










    SCHIZAPHIS GRAMINIUM (RONDANI, 1852). “PULGÓN VERDE DE LOS CEREALES”

    Morfología Los adultos ápteros son pequeños, oval alargados, de color verde manzana brillante, con una distintiva franja dorsal a lo largo del cuerpo de color verde oscuro a verde azulada. Las antenas son oscuras, cortas y no llegan a la altura de los sifones, pero superan a la mitad del cuerpo. Los sifones se encuentran bien desarrollados, son más pálidos que el cuerpo y sus ápices son de color negro. La cauda es del color general del cuerpo. Los alados tienen la cabeza y el protórax amarillento parduzco, el abdomen verde amarillento a verde oscuro, con los lóbulos torácicos negros. Los sifones también son claros con los extremos oscuros, como en las formas ápteras. Tanto ápteros como alados son pequeños, miden entre 1,3 a 2,1 mm Existen biotipos de este pulgón; los cuales difieren en el rango de plantas huéspedes y en la época que alcanzan los máximos picos poblacionales. Además debido a estos biotipos su presencia es prácticamente

    METOPOLOPHIUM DIRHODUM (WALKER, 1849). “PULGÓN AMARILLO DE LOS CEREALES”
    Morfología Las formas ápteras de este áfido miden entre 1,6 a 2,9 mm de largo es de color amarillo verdoso a rosado; y en el dorso posee una franja de color verde brillante que lo caracteriza. Las antenas son largas, sobrepasando la base de los sifones y los antenitos terminan en su ápice en una coloración más oscura. Los cornículos o sifones son cilíndricos y largos y poseen el mismo color pálido del cuerpo, al igual que las patas y la cauda. Los alados miden de 1,6 a 3,3 mm, tienen el abdomen verde pero sin la franja en el dorso abdominal marcada


    SITOBION AVENAE (FABRICIUS, 1775). “PULGÓN DE LA ESPIGA” 

     Morfología Los adultos ápteros son de tamaño medio entre 1,3 a 3,3 mm de longitud y la forma de cuerpo es fusiforme. El color del cuerpo es variable existiendo formas claras de color verde amarillento a crema y formas oscuras, color rojizo sucio a negro; y a veces es brillante. Los sifones son largos de color negro no mucho más largos que la cauda que es de color verde pálido. Las antenas están uniformemente pigmentadas son marrones oscuras a negruzcas, sobrepasan la base de los sifones y ocupan la 3/4 parte del cuerpo. Los alados son de colores similares, pero dorsalmente más oscuros en el dorso de los segmentos abdominales.


    Daños
    Los áfidos se alimentan de las hojas, los renuevos, las flores, los frutos, las ramas, los tallos y las raíces de una gran diversidad de plantas, árboles y arbustos. 
    Altas poblaciones de estos insectos causan que las hojas jóvenes, los renuevos y las flores se arruguen o enrosquen. 

    Su ataque ocasiona que se agudicen los síntomas de la marchitez en tiempos de sequía y que las plantas, los árboles y los arbustos se vean deslucidos. Una población alta de áfidos puede retrasar el crecimiento y destruir los renuevos. Además del daño que causan por sí solos, los áfidos transmiten virus que causan enfermedades serias en las plantas

    También, estas plagas secretan una sustancia azucarada tipo melaza que promueve el crecimiento de un hongo negro conocido como fumagina o moho de hollín. Este hongo no parasita las plantas, los árboles ni los arbustos, pero les desluce su apariencia y disminuye la acción fotosintética del follaje.

    Las hormigas también se alimentan de esta secreción azucarada y tienen una relación simbiótica con los áfidos. Esta relación simbiótica consiste en que las hormigas protegen a los áfidos y los transportan de una planta a otra a cambio de la secreción azucarada.

    Cuando los árboles o arbustos están altamente infestados con áfidos, hay una producción constante de la secreción azucarada. Esto ocasiona mucho malestar porque la sustancia azucarada forma manchas negruzcas al caer sobre los automóviles, las aceras, las plantas y cualquier objeto que esté debajo. Estas manchas son difíciles de remover.



    CONTROL

    Control cultural
    El control cultural es en este caso el más importante, muchas veces es necesario en áreas afectadas por Myzus persicae, de escoger para los cultivos atacados, varie­dades resistentes a virus, para eliminar el efecto de Myzus persicae como vector de virus.
    Examine las plantas, los árboles y los arbustos semanalmente para detectar la presencia de los áfidos. También, para saber si existen hojas deformadas y gotas brillantes de la secreción azucarada.
    Las plantas, los árboles y los arbustos infestados que se encuentren en tiestos deben separarse de los sanos.

    Control Físico
    Tratar de tomar en cuenta que esta especie se desarrolla mejor en condiciones secas y de  poco sol. El sol muy fuerte parece mer­mar un poco su velocidad de multiplicación. Un control bastan­te eficaz, más que todo para los alados, es el riego por aspersión aérea, poniendo los aspersores más altos que el cultivo, los pulgones caen al suelo, arrastra­dos por el agua, los alados son los que sufren mayor daño.
    En plantas, arbustos y árboles pequeños, los áfidos pueden removerse con un cepillo de cerdas suaves, un paño húmedo o una mota de algodón empapada en alcohol o aceite vegetal.

    En plantas y árboles de tallo fuerte los áfidos pueden eliminarse con agua a presión de una manguera. Asegúrese de limpiar ambas caras de las hojas, en especial la inferior que es donde generalmente se localizan los áfidos.


    Control químico
    El control químico de esta espe­cie es casi siempre inútil , la es­pecie ha desarrollado una resitencia a una gran cantidad de venenos diferentes y además usando insecticidas se destruye la posibilidad de control biológi­co natural, casi siempre presen­te y bastante efectivo.

    Si la infestación es alta, rocíe con insecticida todo el follaje, principalmente en las áreas abultadas, los renuevos y debajo de las hojas. Los insecticidas de jabón o aceite son los más indicados porque tienden a ser los menos perjudiciales a los enemigos naturales de los áfidos. Información sobre los insecticidas de jabón, aceite y de otros insecticidas ecológicos aparece en las ediciones de esta carta periódica correspondientes a marzo, abril y mayo de 2005. 

    Control Ecológico
    Los insecticidas ecológicos son los más apropiados para usarse en los jardines que estén en el interior de las residencias. Las plantas, árboles o arbustos infestados que estén en tiestos en el interior de las residencias deben sacarse al jardín para recibir el tratamiento de insecticida. ƒ Repita las aplicaciones de insecticidas según sea necesario hasta que desaparezcan los áfidos. Normalmente, hay que repetirlas cada dos o tres días. Inspeccione las plantas entre las 24 a 36 horas después de cada aplicación para confirmar la eficacia del insecticida usado. ƒ 
    Generalmente, los árboles y los arbustos establecidos no se afectan significativamente por los ataques de los áfidos. En las plantas una infestación muy alta de áfidos puede causar daños significativos. En ocasiones es necesario podar una porción o todo el follaje de las plantas infestadas.

    Control biológico
    El control biológico natural siem­pre es bastante eficaz cuando no se usa insecticidas. Casi siem­pre se puede constatar la acción benéfica de moscas sírfidos, de leones de áfidos y mariquitas.
     
    El control biológico puede ser empleado mediante la introduc­ción en el cultivo de cantidad 
    depredadores y de parasitoidesprincipalmente leones de áfidios, y parasitoides. Estos insectos se tienen que producir en crianza masiva antes de su utilización en el campo.
    Se han reportado alrededor del mundo una gran cantidad de ene­migos naturales de este pulgón.
    Muchos depredadores y también muchos parasitoides.
    Los depredadores reportados son los siguientes: Arañas, chin­ches antocoridos, chinche ojónleón de afidos, león de afido café, coleópteros coccinelidos o mariquitas, moscas sirfidos y avispa esfecidoLos parasitoides reportados sonavispitas bracónicas del grupo
    afidiídos, avispitas afelínidosavispitas encirtidos
    Algunos hongos atacan a este pulgón, se han reportado los sguientes: Empusa aphidis,
    verticilium lecanii.


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